Materiales básicos
Eligiendo los elementos
De un arbusto silvestre de retama, podemos elegir las ramas que más elegancia puedan ofrecer, atendiendo a su curvatura natural, sus formas, ramas secundarias y hojas, incluso los brotes o frutos que puedan tener.
Obviamente, se trata de un ejercicio de imaginación: mirar con ojos creativos, pensando en eliminar todo lo que sobra y quedarnos en lo esencial. Eso lo haremos paso a paso. |
El conjunto lo completaremos con un ramo de tulipanes.
Hay que decir que nunca se ponen en número par, únicamente se permiten 2. Las combinaciones posibles son: 1, 2, 3, 5, 7,11, 13... El número 4 se lee "Shi", vocablo homónimo a "muerte", lo mismo ocurre con el 9 que puede confundirse con la palabra "sufrimiento", por esta razón nunca se utilizará un conjunto en el que la suma de sus elementos den 4 ó 9. En este caso concreto utilizaremos 5. |
El resultado final
Una vez elaborado, el ikebana resultante es este.
La forma se denomina "Vertical informal" y el estilo "Moribana (森花)" que significa "Flores en el bosque". Se trata de conseguir un efecto natural, propio de un paisaje silvestre, monte, campo, bosque, floresta... Algo que permita a nuestra mente y espíritu evocar y "transportarse" al rincón que hemos realizado. Compárese este resultado con el arbusto en su forma natural para comprender el arte del Ikebana o Kado. Respetando el entorno natural, pero dándo una "nueva vida" a las flores, resaltando su belleza. |